E.M.D.R
(Eye movement desensitization and reprocessing)
E.M.D.R
(Eye movement desensitization and reprocessing)

Otra de las herramientas que pongo al servicio de mis consultantes en mi práctica psicoterapéutica, es la Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares
Es un método psicoterapéutico innovador que acelera el tratamiento de un amplio rango de patologías fóbicas y traumáticas. Ayuda al consultante a liberarse del pasado y vivir un presente sano y productivo, metabolizando rápidamente el residuo disfuncional del pasado, y transformándolo en algo útil. Puede tratarse de incidentes críticos fácilmente identificables, o de las aparentemente inofensivas interacciones negativas con la familia, con personas de la misma edad o condición, con profesores, personas desconocidas y otras que hayan dejado un efecto negativo duradero.
El cuerpo humano ha sido dotado de un sistema de autosanación tanto físico como emocional, pero si el sistema está siendo obstaculizado, o sufre un desequilibrio debido al impacto de un trauma, se observará la respuesta de una adaptación equivocada. No importa si se trata de un suceso traumático con “T” o con “t”, si persiste un efecto negativo duradero en la psique y la autoestima del individuo, se trata de un trauma. Cuando experimentamos un trauma psicológico, al parecer ocurre un desequilibrio en el sistema nervioso debido a cambios en los neurotransmisores. El sistema de procesamiento de la información se ve incapacitado para funcionar óptimamente.

El énfasis clínico estriba en generar efectos terapéuticos por medio de la conexión adaptativa de redes neurofisiológicas asociativas, localizadas en el sistema de procesamiento de la información , que nos permite liberarnos así de limitaciones aceptadas previamente.
Con el método EMDR la información disfuncional sufre una transformación tanto en forma como en significado, incorporando sentimientos, emociones y cogniciones, que resultan enriquecedoras y no autodenigrantes. Cuando logramos realizar conexiones con asociaciones apropiadas, la experiencia entonces es empleada constructivamente por el consultante y es integrada a un esquema cognitivo y emocional positivo; propiciando una resolución adaptativa. Al integrar las emociones perturbadoras, el aprendizaje se inicia. Lo que resulta útil es aprendido y almacenado con las emociones y sentimientos apropiados, y está disponible para utilizarse cuando se requiera.
Un suceso bien procesado, podemos recordarlo, pero no experimentamos las viejas emociones y sensaciones en el presente. Nuestros recuerdos nos deben brindar información, más no controlarnos.